
Pero afortunadamente en esta serie el American Dream se trunca desde el primer capitulo y lo que nos presentan es a un ex jugador retirado tras una lesión que trabaja de profesor de deporte en un colegio público, una frustrada esposa que se acaba divorciando y casándose con un dentista con el que únicamente comparte el gusto por aparentar y dos hijos adolescentes, gorditos y con estética gótica, que viven con su apurado padre.
El argumento de la serie – que incluye al profe trabajando como gigoló para sostener a la familia – es bastante divertido e interesante, pero con sólo tres capítulos emitidos no estoy segura si sabrán sacarle todo el provecho posible. Seguiré con atención los pasos de este grupo de perdedores a ver si consiguen darle algo más de vidilla a la serie.
*
No hay comentarios:
Publicar un comentario